Cuatro allanamientos simultáneos para desbaratar comercio ilegal de elementos robados a SAMEEP
Los operativos ocurrieron esta tarde en centros de reciclaje ubicados dentro del Gran Resistencia. Los elementos secuestrados tienen valor millonario.
Distintas divisiones policiales llevaron a cabo cuatro allanamientos simultáneos en la tarde de este jueves dentro de chacaritas ubicadas dentro de la provincia y desbarataron una banda que comercializaba objetos de Sameep robados.
La denuncia había sido presentada por el asesor legal del directorio y gerencia general de la empresa local. En su escrito, el representante afirmó que hace tiempo se realizan distintos ilícitos en Resistencia, Fontana y Barranqueras en los cuales roban medidores de agua, tapas de hierro fundido y otros objetos de similares características.
La División Delitos Contra la Propiedad inició tareas investigativas y logró determinar que los elementos robados son normalmente comercializados en los centros de reciclajes, o «chacaritas».
Tal es así que este jueves, alrededor de las 14, se llevaron a cabo cuatro allanamientos simultáneos bajo la orden del Juzgado de Garantías N°3. En el primer operativo, que se realizó en la chacarita ubicada en calle Goitia y Chamamé de Resistencia, se secuestró 20 llaves de paso de diversas medidas y se detuvo al dueño del lugar, un hombre de 51 años.
El segundo operativo tuvo lugar en la intersección de Misiones y Goboto, Barranqueras. El resultado fue negativo. En tanto, otro allanamiento se realizó en Avenida Rivadavia 1.675 de Resistencia, pero tampoco se hallaron elementos de interés.
Por último, en avenida Alvear al 3.000, Fontana, los agentes lograron el secuestro de 73 llaves maestras, 24 llaves de paso, 8 llaves esféricas y 8 cuerpos de medidores. Personal de SAMEEP se hizo presente en el lugar, y reconoció los elementos por lo que fueron restituidos a la empresa.
La Fiscalía N°6 ordenó el secuestro en carácter de impostergable, sobre las 79 llaves de paso que estaban en nuevo estado, 225 duplas de bronce, 95 fardos de cables compactados y otros rollos dispersos. También se dispuso la detención del dueño de esta última recicladora, por supuesto encubrimiento.